Gabriel Cisneros Abedrabbo / PENÉLOPE



Has escuchado mis divagaciones en el mar,
has visto las veces que caí en
corpiños y vino;
no te pido que olvides
mi frágil humanidad
te exijo que me ames
sobre ella.

He convivido con magas de cabellos dorados
que inventaron un limbo
en el antiguo puerto de los dioses,
con panteras de tambores
que levantan la selva con su ébano,
a pesar de sus mañas vuelvo
ante ti señora
a levantar de mi derrota
los sofismas de las vírgenes
para morir junto a ti,
que es el mayor acto de amor sobre los vientos.

Bebe mi sangre,
es la misma con la que firme
para entregarte versos de mi cuerpo,
es la misma con la que arranque de tu intimidad ese hijo,
que nos ayudará a ver el futuro.

Bebe, lo más sagrado que puedo ofrecerte
y prepara el ritual
para enfrentar la eternidad.



Tomado de: Penélope o Tratado de los amantes de Ítaca, en proceso de parto.