Hélie Lug




Atahualpa

Atahualpa no desea salvarse a sí mismo. En la penumbra del calabozo juega a la taptana con resplandecientes maíces que marcan sobre el tablero el curso inexorable de los astros. Pizarro -abrazado a las rodillas del Hijo del Sol- recuerda a Pilatos y se estremece. Relinchan los caballos. Valverde el cura entra a escenario biblia en mano; los actores representan el drama con absoluta convicción.
Atahualpa vuelve a su camerino. Terminado el ensayo arroja la máscara. Detrás de ésta, el rostro azul de Shiva -en rictus feroz - le sonríe desde el espejo con imperecedera aprobación.

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Cabeza de Venado

Aves de luz tras la noche al otro lado de los riscos
Entre el abismo y el canto
Cabeza de Venado roza ligero tu hombro
Para volver tras los caballos salvajes que se ordenan en círculos a su llegada.

 Verde y amarga
 La sangre de sus brazos
 Tiende el puente más claro a las orillas de tu muerte:

Allá donde estrella boreal transita con desusada certidumbre.

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El lugar de las Aguas

—Perro negro al otro lado del río:

En los colores foscos de la tierra se confunde mi origen
Hermanado a los perros cautivos
Que mojan este espejo de mis fabulaciones.

En ti hay una rama intensa para mi agonía.

—Perro negro al otro lado del río:

Nada me es ajeno
Bebo el agua plagada de fósforos y de algas
Hundida de rodillas en la arena

Recojo berros en la orilla para nutrir la roja savia de mi prole
Que cultivaré -hoy más callada- a la sombra del duraznero
En el parche de tierra que me queda en préstamo.

¡Ah!, la roca del redil
-faro y balsámica resina-
Yace oculta bajo las natas de las amplias coagulaciones del ensueño.

¡Qué queda sino escarbar con nítido furor!
Hozar en pos de luz
Tras su aroma de vendavales y de atmósferas.

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El retorno de Olón

De entre las páginas del gran libro
Rojo de trazos negros
Un ave sale en vuelo.

Se posa en alta montaña
Hecha de torres de libros y bultos de embalaje
Y canta en los lagares del corazón
O sobre el polvo al borde de las ventanas.

 Pero es inexplicable su sentencia,
 Y lejano el paraje a donde emprende el vuelo.